Higiene

Baños

El denso y suave pelo de las chinchillas, quizás su característica más sobresaliente, requiere un poco de atención por nuestra parte para mantenerse en un estado óptimo.

 

Lo primero que hay que saber es que nunca se debe bañar a una chinchilla. Debido a que vivían en regiones de alta montaña, donde la temperatura por la noche podía descender de manera drástica, estos animales se adaptaron para mantener su pelaje en buenas condiciones sin necesidad de bañarse. Una chinchilla mojada, en esas condiciones (y en la actualidad en nuestras casas), era una chinchilla muerta (o gravemente enferma), así que estos animales recurrieron a un elemento abundante en su hábitat, que les permitía cuidar su abrigo natural sin necesidad de mojarse, y sin correr por tanto el riesgo de morir de hipotermia. Estamos hablando de la arena procedente de cenizas volcánicas que abunda en la cordillera de los Andes. La adaptación ha llegado a tal punto que el agua estropea el pelaje de las chinchillas, y los baños de arena les resultan imprescindibles para que su pelo se mantenga suelto y esponjoso, reteniendo así la capa de aire que les es indispensable para que realice su función aislante. 

No se puede usar cualquier tipo de material para que las chinchillas las utilicen en el mantenimiento de su capa, un tipo inadecuado de material para su baño no sólo no contribuirá al buen estado de su pelo, sino que es posible que su efecto sea el contrario. Además se corre el riesgo de causar graves problemas a las chinchillas cuando usamos elementos incorrectos entre ellos los hongos o algún tipo de dermatitis.

 

Nosotros solemos gastar la arena para baños de chinchillas de la marca Novopet, pero en el mercado podemos encotrar mucha variedad, tanto de tipos como de marcas. Algunas marcas conocidas y de calidad son: VitaKraft Sandy,  White Molen, Versele Laga Prestiege, Zolux, Novopet, etc. 

 

Nos valdrá cualquier recipiente (taper de plástico, cajas de zapatos, bañera específica para baños de chinchillas, cuencos de barro, cajones para gatos, incluso alguno de cristal) en el que nuestra mascota pueda moverse con libertad, que tenga una profundidad tal que permita añadir arena hasta una altura de 5 cm. y que todavía dispongamos de un borde lo suficientemente alto como para que la chinchilla en su éxtasis no nos llene la casa de arena. Es preferible que la bandeja que empleemos sea de un material resistente y que nos permita su desinfección. También es recomendable que el recipiente sea pesado para evitar vuelcos accidentales. La mayoría de los animales a los que les gusta darse baños de arena orinan en el recipiente al terminar de usarla, pero se ha comprobado que si permanece durante más tiempo del indispensable en el interior de la jaula puede pasar a convertirse en el retrete particular de las chinchillas. Es preferible que cada animal cuente con su propia bandeja de baño (o en el caso de tener muchas se podría usar el mismo recipiente para las chinchillas que compartan la misma jaula) para evitar en la medida de lo posible la transmisión de enfermedades contagiosas.

 

Los baños de arena se suelen realizas durante el paseo de las chinchillas, dejando así que ellas mismas los tomen a su antojo mediante el paseo consiguiendo que se desestresen y lo disfruten. 

En general suele ser suficiente con un baño cada dos o tres días, pero hay una serie de signos que nos pueden ayudar a determinar si nos quedamos cortos o nos pasamos: 

 

*Si el pelo de nuestra chinchilla se muestra mate, apelmazado o húmedo, es necesario que incrementemos la frecuencia de los baños de arena.

 

*Si por el contrario nuestra mascota se rasca constantemente sin razón aparente, su piel se está secando en exceso por el abuso de los baños de polvo, y tendremos que reducir su frecuencia.


Después de cada uso habrá que retirar la arena que se haya manchado con orina y/o heces.  Cada semana es recomendable cambiar la arena de los baños si se tiene más de una chinchilla, en caso contrario cambiar cada 12 días. 

Sustratos

Las chinchillas son animales de costumbres, porlo que suelen orinar siempre en un mismo lugar. Por ello mismo (nosotros) solemos acostumbrarlas a hacerlo en una esquinera con material absorbente o en el suelo de las jaulas con sustrato (hay muchos tipos diferentes). Las diferencias entre unos y otros son, principalmente, el precio, la capacidad absorbente de orina y el contenedor de olores. Las tiras de papel de periódico no servirán por su prácticamente nula capacidad de absorción y por la presencia de tinta, la cual es tóxica para nuestras mascotas. Tampoco debemos utilizar arena para gatos ni las perlas absorventes, pues el polvo que sueltan les tapona las vías respiratorias,  es muy abrasivo. Recomendamos casi exclusivamente los sustratos de origen vegetal porque en el caso de ser ingeridos no harán ningún daño.

 

A continuación tenéis una breve descripción de los sustratos que más fácilmente encontraremos en el mercado en un orden de mayor a menor calidad.

 

* Bloques de viruta prensada: se presentan en bolsas de entre 5 y 10 litros o hasta de 40. Tienen gran capacidad de absorción y se deshacen según van absorbiendo la orina. Cada bloque tiene el peso suficiente como para que las chinchillas no los tiren fuera de la jaula alsaltar o jugar.

* Copos de maíz: es un granulado desecado de mazorcas de maíz. Se presenta en bolsas de 10 litros o más. Tienen menor capacidad de absorción que los bloques y son de tamaño y peso bastante reducidos, por lo que con el movimiento de las chinchillas se sale de la jaula una cierta cantidad. Además hay que cambiarles este tipo de sustrato con mayor frecuencia. No pasa nada si los comen.

* Viruta de madera: se presenta en envases prensados de 1 y 2’5 kilos. Quizá es el material más utilizado, debido a su menor precio, aunque hay opciones realmente más satisfactorias. No tiene demasiada capacidad absorbente y hay que renovar el sustrato con bastante mayor frecuencia que los demás, deja olores tanto en el ambiente como en la chinchilla. Debido a su escaso peso las chinchillas al moverse tiran bastante cantidad fuera de la jaula y del esquinero.

Según el tipo de sustrato lo cambiaremos más a menudo o en menos días, teniendo en cuenta que la limpieza de estos animalitos es tan importante como su alimentación.

 

Como antes comentábamos, solemos ponerles un esquinero de plástico duro (difícil de roer), una fuente de barro y/o una fuente de cristal. Estas dos últimas al pesar más y ser menos porosas son mas higíenicas y de mayor facilidad de limpieza, además de que a la larga sale más económicas porque no las pueden morder y destrozar.

 

Mudas y peinado.

Las chinchillas mudan por completo su pelo cada tres meses aproximadamente, empiezan por la cabeza y terminan por la cola. Notaremos la muda por la cantidad de pelo extra que suelta la chinchilla, dejando sobre todo en el suelo de la jaula varios mechones.

 

Una manera efectiva de disminuir la cantidad de pelo que nuestra chinchilla suelta por la casa y en su jaula, es someterla a un cepillado diario. Para ello emplearemos en primer lugar un peine de púas gruesas y separadas. Cepillaremos siempre de cola hacia cabeza. Una vez que hayamos terminado con el peine de púas gruesas procederemos a realizar una segunda pasada con un peine de púas finas, siempre siguiendo el mismo sentido. El mejor momento para peinar a nuestra mascota es antes del baño de arena. La arena penetrará mejor, el baño se ensuciará menos y los resultados para el pelaje serán mejores .

Las patas, los dientes, las orejas y los ojos de las chinchillas también necesitan un control y una higiene más sencilla. Si tenemos maderas en la jaula es posible que se resequen más las patas, al igual que si usamos virutas prensadas debido a la dureza. Debemos de mantener las maderas y los suelos limpios (preferiblemente limpiar con Don Limpio PH Neutro, sin olores) para evitar que se manchen las patas si ha goteado el bebedero por ejemplo y evitar que se infecten, proliferen los hongos o bacterias.  Una vez por semana les pondremos en las patitas (traseras sobre todo) crema de Neutrogena Pies y Manos. Esta crema no contiene aloe vera (altamente venenosa para las chinchillas) y su PH Neutro nos  evitará  irritaciones.

Los ojos y las orejas de las chinchillas no suelen necesitar limpieza pero si un control frecuente. Los ojos debemos de vigilar que estén limpios y que no haya saltado alguna arenilla que los pueda irritar o producir conjuntivitis, y las orejas lo mismo (es recomendable mirarlo después de cada baño de arena). Si presenta granos de arena en los ojos, lo deberíamos ayudar a quitárselos con una gasita húmeda con agua o con infusión de manzanilla tibia. Si se observa que aun habiéndole hecho el baño con manzanilla, dos veces al día en caso de irritació, ésta persiste llevar al veterinario lo antes posible para evitar una conjuntivitis grave o una úlcera.